Con el devenir del tiempo es cada vez más frecuente el emprendimiento a escala mundial y cada vez son más los emprendedores que consiguen el éxito a través de sus nuevos proyectos. República Dominicana no está ajena a este fenómeno que estimula a las nuevas generaciones a crear sus propios negocios en contraposición a formar parte de estructuras empresariales preexistentes.

No obstante, el triunfo de los emprendedores no es garantizado y depende de un sinnúmero de factores de mayor o menor trascendencia. Uno de estos, a veces soslayado, es el aprovechamiento del marco legal como herramienta estratégica para confrontar ciertos desafíos propios de su nueva aventura empresarial. Para quien esté considerando irse por el camino del emprendimiento, les comparto algunos de mis principales consejos legales.

Busca asistencia legal capaz

Las normas sirven para brindar seguridad a las decisiones y estructuras de negocios adoptadas en la génesis de toda empresa. Los abogados aptos no solo resuelven inconvenientes sino que los evitan brindando una arquitectura legal que se ajuste a las necesidades del proyecto embrionario.

Con tu asesor busca alternativas de facturación, como algún “paquete de emprendedores” que puede abarcar la asesoría global ajustada al tipo de negocio, incorporación del vehículo corporativo, registro de marcas y preparación de contratos, tipos de empleados o cualquier otro mecanismos de pago de los honorarios alienados con las necesidades del nuevo negocio.

Constituir una sociedad con conciencia fiscal

Formalizarse y constituir una empresa tiene varias ventajas, la primera es que te da credibilidad frente a terceros; la segunda es que dependiendo de la estructura empresarial elegida, la responsabilidad de los socios es limitada; como trabajador individual, la persona puede ser considerada personalmente responsable si algo sale mal.

Adicionalmente, con un buen acuerdo de sociedad puedes prever futuras disputas internas de la empresa. Un acuerdo de sociedad debe incluir por lo menos los siguientes puntos fundamentales: dirección de la empresa, esto incluye las funciones de cada administrador; decisión sobre negocios de la sociedad; desembolso de capital; arreglos bancarios y financiación de la empresa; emisión y transferencia de acciones; pago de dividendos; limitaciones e impedimento a la competencia; y método para resolver las disputas.

Por último, la organización contable y fiscal. El Estado siempre será un socio silente al que todo negocio deberá considerarle una parte importante de sus beneficios netos vía el pago del impuesto sobre la renta. Incorporar el negocio como una sociedad implica el cumplimiento de una serie de deberes y obligaciones corporativas y fiscales que si bien representan un costo de cumplimiento, añaden transparencia y formalidad legal al negocio y evitan situaciones engorrosas con el referido socio: el Estado.

Cumplimiento legal e incentivos

Todas las actividades están sujetas a la ley laboral y de seguridad social en República Dominicana, por lo que se debe tener conciencia de sus requerimientos y cargas para el negocio. Paralelamente, ciertas actividades económicas son reguladas y la observancia de dichas reglas es un prerrequisito para emprender cualquier negocio relacionado. Existen amplias regulaciones sanitarias, de protección al consumidor, medio ambiente y otras aplicables a industrias específicas que es necesario observar para el desarrollo de un sinfín de empresas.

En ciertos casos, al cumplir con los requerimientos de algunas normas especiales, el emprendedor puede y debe aprovechar los incentivos y beneficios que el Estado le ofrece como los de la Ley 488-08, que establece un Régimen Regulatorio para el Desarrollo y Competitividad de las MIPYMES, así como la Ley 688-16 de Emprendimiento promulgada a finales de 2016.

Protección a los intangibles

Es elemental para un emprendedor considerar los asuntos de propiedad intelectual. Es necesario buscar asesoramiento para proteger su marca, su nombre de dominio, su invención, derechos de autor, entre otros, para así proteger al máximo la inversión hecha y disminuir riesgos legales.

Acuerdo de confidencialidad y no circunvención

Tener un acuerdo de confidencialidad y no circunvención antes de compartir cualquier información confidencial es fundamental para preservar la ventaja competitiva del proyecto. Este documento te ayuda a proteger la propiedad intelectual, como los secretos comerciales del negocio y lo más importante, que las ideas no puedan con facilidad ser ejecutadas y registradas por un tercero y suplantarte en tus derechos.

Los avances de la ciencia y la tecnología constituyen la dinamo de la sociedad. De ahí la importancia del emprendimiento, tanto así que hoy es una carrera que se estudia en universidades como maestría. En la medida en que nuestro país se desarrolle, el emprendimiento –enmarcado en nuestro derecho sustantivo y con un asesoramiento legal adecuado– irá tomando una posición más relevante en la sociedad, y por lo tanto en nuestra economía.ν