Reunión de Duelo

 

En las últimas ocasiones que he asistido a manifestar mis condolencias a familiares y amigos por la pérdida un ser querido, he observado con tristeza una y otra vez, la inconducta de un sinnúmero de personas, que sin ninguna consideración hacia los deudos, convierten un cuadro de dolor y llanto en una tertulia social, atraídas por la circunstancia de que pueden aprovechar esa oportunidad para entregar un papelito a un político, saludar a un empresario o a un personaje importante.

 

Sugiero, que los que vayamos a acompañar en tales casos a nuestros parientes y amigos, observemos una conducta propia de las circunstancias, manifestando en todo momento con nuestro comportamiento una actitud de respeto a sus sentimientos.

 

Observar estas reglas ahorrarían a los dolientes el tormento de ver en esos momentos de dolor, frente al cadáver de su ser querido, una reunión de personas indolentes que conversan, ríen y celebran los chistes en medio de una familia llorosa y desconsolada.

 

En una reunión de duelo, no deben oírse expresiones de animación o de alegría que en alguna forma desdigan de la naturaleza de la misma.