Un buen arquitecto paisajista sabe cómo hacer que un cliente se sienta encantado con su jardín recién diseñado. En esta labor se desenvuelve la empresa Costa Farms, el principal productor y vendedor al por mayor de plantas ornamentales en Norteamérica y el Caribe, algo que la convierte en líder en este rubro.
La compañía es una empresa familiar que José Costa fundó en 1961 en Estados Unidos. La demanda le hizo buscar materia prima de distintas partes del mundo y así se estableció en República Dominicana, país con excepcionales condiciones ambientales y estratégica posición geográfica. Costa Farms Dominicana es hoy uno de los principales proveedores de material vegetativo semidesarrollado, ha pasado a ser exportador mundial y se dedica a la venta local de producto terminado y al paisajismo y mantenimiento.
El crecimiento de la empresa ha permitido la creación de más de 300 empleos en La Romana y zonas aledañas, además de un intercambio cultural debido al programa de pasantías para estudiantes de otras latitudes. Para sus operaciones cuenta con tres fincas en suelo dominicano, donde se cultivan todo tipo de plantas que van desde palmeras de seis metros (20 pies) hasta orquídeas en miniatura. El vivero y las oficinas centrales radican en La Romana (Carretera a Higüeral) y el resto de las instalaciones se encuentran en Miches, Sabana de la Mar y próximamente en Bávaro.
En la actualidad Costa Farms Dominicana distribuye sus plantas en las mayores cadenas de supermercados de nuestro país y trabaja en los proyectos más grandes de jardinería y paisajismo. La compañía ha sido acreedora del premio “International Grower of the Year 2016” y “Best in Show” en la Exposición Internacional de Plantas Tropicales (TPIE) 2016 y 2017.
Personal experimentado
Sus experimentados arquitectos paisajistas buscan satisfacer las más grandes exigencias de los clientes. Los diseños surgen a partir de un amplio estudio que incluye análisis de sitio, levantamiento fotográfico, análisis de planos y curvas de nivel, y se basan en criterios de sostenibilidad, respeto y sincronía con la naturaleza y el uso de especies locales para minimizar el impacto y garantizar adaptación y resistencia.
El departamento de paisajismo e instalaciones, compuesto por ingenieros, arquitectos paisajistas, plomeros y jardineros, se ocupa de todo el proceso, desde la comunicación con el cliente, la ejecución de la jardinería y la instalación de riego, hasta la entrega del jardín con su correspondiente garantía y mantenimiento. El equipo directivo lo conforman Gabriel Pinto, director general y comercial (costarricense); Manuel Santana, director financiero y administrativo (dominicano) y Jehan Ramírez, director de Operaciones (venezolano).
Al ser la mayor exportadora y productora del país, Costa Farms Dominicana siempre cuenta con gran disponibilidad de plantas y una variedad de más de 400 especies. Por lo general, la empresa prioriza el uso de plantas endémicas (muy resistentes, de bajo consumo de agua y bajo mantenimiento). Además, posee en las fincas de La Romana, Sabana de la Mar y Miches, plantas ejemplares de gran tamaño y diversas especies no endémicas, lo que las hace singulares en el territorio nacional.
Teniendo en cuenta las necesidades del jardín, la empresa asesora al cliente para lograr el mejor servicio y la mayor satisfacción. Cada mantenimiento es personalizado según las necesidades y posibilidades del cliente y no se escatima en equipos para la buena práctica del seguimiento. Gracias a la variedad y los tamaños de las plantas que emplea Costa Farms Dominicana, se reduce de forma considerable el período de adaptación y desarrollo en los proyectos de jardines. La empresa se asegura que la adaptación sea lo mejor posible para garantizar el éxito de sobrevivencia.
Proyectos de renombre
Algunos de los proyectos de mayor envergadura en los que ha trabajado en el sector turístico han sido para Casa de Campo, y dentro de este complejo varias villas, como las de los cantantes Marc Anthony y Pitbull; el Aeropuerto Internacional de La Romana y el complejo Nickelodeon/Sensatori en Punta Cana. Este último ha sido el de mayor complejidad debido al desafío de desarrollar un proyecto de gran magnitud en un tiempo limitado, para su inauguración. El trabajo incluyó complicadas estructuras, figuras animadas hechas con plantas lo que demandó una gran cantidad de vegetación en tiempo récord.