El Dominican Annual Tourism Exchange (DATE, por sus siglas en inglés), la mayor feria de fomento del sector turístico en el país y el Caribe, regresa este año a finales de abril para afianzarse como principal plataforma de intercambios de negocios entre agentes de viajes, turoperadores extranjeros y suplidores del sector.
En este marco –vigesimotercera edición– se dan cita representantes de los grandes mercados emisores con el segmento hotelero y la oferta complementaria local. Es el evento que se enfoca en promover las bondades de nuestro país como destino. Según David Llibre, presidente de la Asociación Nacional de Hoteles y Turismo de República Dominicana (Asonahores), esta versión contará con mayor participación que en ediciones anteriores, incluso se suman por primera vez importantes cadenas hoteleras nacionales e internacionales.
«Hemos integrado nuevos actores en la dinámica de ejecución de actividades, por lo que en la sede de nuestros amigos del Grupo Barceló ofreceremos un espacio exclusivo para las reuniones, desde el Gran Salón Bávaro; la inauguración se realizará en el Dreams Flora Punta Cana Resort & Spa, y la noche dominicana estará guiada por el moderno parque temático Katmandú Punta Cana», puntualiza Llibre, con quien tuvimos la oportunidad de conversar para conocer más de su trayectoria profesional.
¿Cómo llega David Llibre al sector turismo? ¿Vocación o tradición familiar?
Diría que un poco de ambas. Sin embargo, mi primera disposición hacia el mundo laboral estuvo vinculada con el área de procesos y manufacturas, por lo que a mis 18 años decidí estudiar Ingeniería Industrial en Estados Unidos. Luego me inserté en Grupo M, una de las más prestigiosas zonas francas del Caribe, donde trabajé en gestión de inventarios y procesos. De ahí pasé a una empresa de productos lácteos como gerente de Exportación y a los dos años me fui a Estados Unidos a realizar una maestría en Administración de empresas enfocada en Finanzas.
¿Qué pensaba hacer de regreso al país?
Siempre supe que una vez terminados mis estudios regresaría a aportar los conocimientos adquiridos. En 2004 me incorporé a la Superintendencia de Pensiones como responsable de la Comisión de Riesgo; luego pasé a dirigir el departamento de Operaciones de esa institución. Mientras tanto, mi padre, que había estado ligado a la banca y al turismo, a sus 60 años decide adquirir los derechos de la marca hotelera Coral Hotels y relanzarla con una nueva visión de gestión y administración de hoteles, condominios hoteleros y membresías vacacionales. En este punto ya contaba yo con experiencia que ofrecer, de ahí que el señor Llibre y su socio me pidieran formar parte de lo que hoy es Coral Hospitality Corp.
Desde mis inicios me fui formando, aún sin saber, a través de las distintas prácticas realizadas. Nuestro sector es dinámico y versátil, y guarda relación con distintas experiencias y plataformas de formación. Al verlo en retrospectiva, estoy seguro de que todo lo anterior contribuyó al proceso de preparación para llevarme a participar tanto en nuestra empresa como en Asonahores, la cual tengo la fortuna de dirigir.
¿Qué recuerda con más nostalgia de su infancia?
Mi padre es de Puerto Plata, y en los años 80 y 90 ese polo estaba en su mejor momento turístico. Ya sabemos que él había estado ligado estrechamente con el sector. Recuerdo cómo nos pasábamos los veranos en Puerto Plata en los primeros hoteles todo incluido del país, en los cuales, para identificar al huésped, no se tenía un brazalete, sino un gafete con su foto y fechas de entrada y salida. Otros hoteles usaban una especie de cupón para consumir en las diferentes áreas. Puedo decir que fui testigo y parte del inicio del todo incluido en República Dominicana. Luego llegó el concepto del todo incluido las 24 horas, del cual Coral Hotels fue innovador. Siempre tuve claro que me gustaría trabajar en conjunto con mi padre, y el mundo turístico me brindaba esa oportunidad.
¿Cómo valora la incidencia de Asonahores en el desarrollo del sector turístico nacional?
Asonahores ha sido clave en el proceso de desarrollo del sector en República Dominicana. Desde sus inicios, en 1962, los pilares de nuestra institución se basan en representar a los diferentes actores del turismo en escenarios tanto locales como internacionales; y las acciones de promoción y desarrollo de este rubro, realizadas a través de la colaboración pública y privada, han sentado las bases para respaldar la confianza en la inversión turística y el flujo de visitas que exhibimos. Esto ha permitido que nuestra asociación haya podido ir influyendo en un crecimiento ordenado y continuo del turismo dominicano.
¿Cómo trabaja Asonahores en la sostenibilidad del turismo?
El turismo impacta tanto en lo social como en nuestra economía y el medioambiente, por eso necesitamos garantizarle al inversionista hotelero, dada su condición de inversión a largo plazo, reglas claras que se mantengan en el tiempo. En la actualidad, a través de la ley de incentivo con la que contamos, se provee la confianza que requieren los potenciales inversores al momento de colocar sus capitales en nuestro destino.
Sobre el aspecto social, y al entender la importancia de trabajar en el ordenamiento de nuestros polos turísticos para fortalecer la diversidad del turismo naranja, promovemos dicho ordenamiento para poder crear la experiencia que satisface a los turistas e invitarlos a descubrir y formar parte de la cultura del país que visita. Esto requiere garantías de seguridad para que pueda salir de su hotel y los motive a participar, conocernos y repetir su visita. Con el tema medioambiental hemos iniciado aspectos como el combate del sargazo y la regeneración de playas; ambos puntos son resultado de los efectos del cambio climático que afectan a todos los destinos y que conllevan un esfuerzo conjunto del que ya formamos parte.
En 2022 se firmó un memorando de entendimiento entre el país y Estados Unidos como comienzo de las negociaciones para incluir a RD entre las naciones socias de Global Entry, iniciativa que agiliza los procedimientos de entrada a territorio estadounidense. ¿Cuánto se ha avanzado en este sentido?
Uno de los objetivos que tenemos en esta gestión es precisamente la conectividad aérea, la cual promueve esquemas como el Global Entry y el Preclearance, que permitirán el crecimiento y mantenimiento de la llegada de turistas. Nuestro país, una vez que cuente con estas facilidades, aumentará la cantidad de rutas necesarias para garantizar el incremento turístico. El Global Entry, al agilizar los procesos migratorios, cuenta también con el Preclearance, lo que nos haría más competitivos para incentivar que más líneas áreas ofrezcan nuevas rutas y conectar nuestro país con más destinos. Confiamos en que estos temas tomen fuerza en 2023, y que podamos arribar a los acuerdos que satisfagan el interés mostrado en la aprobación de dicho beneficio.
Con casi 61 años, Asonahores ha sido testigo de grandes transformaciones en el turismo en República Dominicana, que hoy es el destino líder en el Caribe. ¿Cómo vislumbra el futuro de la asociación?
La asociación, en conjunto con los presidentes de la primera generación, ha sido responsable del establecimiento del turismo dominicano. Asonahores se embarca ahora en continuar con el desarrollo y crecimiento de este, pero velando por un turismo sostenible que pueda crecer y permanecer en el tiempo. Antes nos preocupaba la seguridad y calidad de los hoteles; hoy poseemos instalaciones hoteleras de primer nivel y competimos con cualquier país en esos aspectos. Ahora que nuestros turistas quieren vivir experiencias y conocer más a fondo las culturas de los países que visitan, contribuimos para que los polos turísticos dominicanos cuenten con los más altos estándares de organización y control, a fin de garantizar seguridad y servicios de primer nivel.
¿Cómo es ser el presidente de tan prestigiosa entidad por la que han pasado otros grandes del turismo, entre ellos su padre Julio Llibre, quien la dirigió de 2010 a 2012?
El poder servir a este sector como presidente de Asonahores, entidad que por 60 años ha estado representando la principal fuerza económica nacional, me genera, a la vez, una alta responsabilidad y un alto nivel de compromiso, pues liderar esta icónica institución es asumir el reto de aportar al trabajo realizado desde una clara visión de los avances obtenidos por el sector y las distintas cadenas de valor que lo forman.
Es un privilegio el seguir los pasos no solo de mi padre, sino también de hombres y mujeres que fueron los responsables, desde las acciones asumidas, de cimentar las bases de un sector turístico comprometido con el desarrollo de República Dominicana, construir uno de los sectores más importantes del aparato productivo nacional y base del desarrollo socioeconómico. Ahora corresponde a las nuevas generaciones continuar el legado a través de innovación y readecuación de los procesos iniciados, para seguir fortaleciéndonos como destino desde un turismo sostenible.
DE CERCA CON DAVID LLIBRE
¿Qué le apasiona más de su trabajo en Coral Hospitality Corp.?
Poder trabajar al tiempo de ser testigo del desarrollo, tanto profesional como personal, de colaboradores que hoy forman parte de nuestra empresa. Tenemos muchos casos de éxito de personas leales: comienzan desde una posición de nivel inicial y hoy son parte del equipo directivo. Por otro lado, nuestra empresa, que cuenta con operaciones en México y Jamaica, es 100 % dominicana y está comprometida con el desarrollo turístico junto a colaboradores que nos han permitido ser líderes en el Caribe en los servicios que prestamos.
¿Dónde prefiere vacacionar David Llibre en el país?
Amo la playa, y nuestro país exhibe las más hermosas del Caribe. También disfruto la exótica gastronomía con que contamos. Un destino que reúne ambas condiciones es Las Terrenas, en Samaná; cada verano se ha convertido en tradición familiar disfrutar una semana en esta espectacular zona de la geografía nacional.
