Entre lo más atractivo de la 58ª reunión de la Comisión de la OMT para Europa, que reunió a representantes de 30 países europeos y otros agentes turísticos de la región para discutir sus políticas prioritarias y fijar la agenda para el programa de trabajo de la OMT durante el bienio 2016-2017, estuvo el seminario sobre “Tecnologías móviles para mejorar la experiencia turística”, celebrado en Haifa, Israel, los días 12 y 13 de mayo.
El seminario de la OMT hizo hincapié en la revolución móvil en el turismo y en cómo las nuevas tecnologías han abierto a los destinos grandes oportunidades de crear experiencias turísticas únicas y personalizadas. Durante el seminario se mostraron los mejores ejemplos de aplicaciones interactivas, juegos de realidad aumentada al servicio del turismo y otras formas de obtener la implicación de los visitantes, y se indagó en la forma de lograr que los destinos mejoren su competitividad aprovechando las posibilidades que las tecnologías móviles ofrecen.
Entre los juegos que más llamaron la atención estuvo Geocaching, presentado por Jenn Seva, Business Development Manager. Este juego de alta tecnología consiste en encontrar tesoros y tiene alcance mundial para quienes disfrutan la aventura y poseen dispositivos con GPS. La idea principal es encontrar los recipientes escondidos al aire libre, llamados geocaches, y luego compartir la experiencias en línea. Todos pueden usar las coordenadas en Geocaching.com para localizar los geocaches.
Al aire libre
El geocaching combina la tecnología con la aventura al aire libre y es una manera excelente de explorar lugares cercanos y lejanos. Es ideal para las acampadas, práctica de senderismo y mientras montamos bicicleta, en paseos en bote o en cualquier actividad al aire libre. La modalidad más sencilla consiste de una libreta o una hoja para que el jugador firme y registre su hallazgo. Los geocaches también pueden contener artículos para intercambiar, pero la mayor recompensa suele ser la travesía para descubrirlos. Existen geocaches en todos los continentes en más de 185 países, incluida República Dominicana. Su localización es bien diversa, desde un parque o un sendero extenso, hasta bajo el agua o en alguna esquina de cualquier calle.
En él participan personas de todas las edades: quienes lo hacen por su cuenta, familias con niños, estudiantes, adultos y jubilados. Jugarlo es una manera de reunir a los amigos o pasar un rato de diversión con la familia. Hasta la fecha, más de 10 millones lo han experimentado, el 43% de ellos a más de 250 km de su casa. Sin embargo, esta peculiar caza del tesoro también tiene sus inconvenientes, pues desde los atentados del 11 de septiembre, la sociedad está en alerta máxima en cuanto a amenazas terroristas, por eso puede ser problemático que vean a un geocacher escondiendo algo, sobre todo en un aeropuerto.
Recomendaciones
Antes de salir elige un geocache en un terreno y un nivel de dificultad que vaya a la par con tus metas; 1/1 es el más fácil y 5/5 el más difícil. Lee la descripción del geocache y no olvides traer las pistas; nunca está de más llevar un mapa. Los obstáculos ambientales podrían hacer que te tome más tiempo para encontrar el tesoro. Como buen turista, lleva suministros como agua, comida y ropa extra. Invita a amigos y familiares a compartir la gratificante experiencia. Dale la información de tu destino a alguien que no vaya contigo.
Ya en el camino ve pensando en la manera de asegurarte de regresar sano y salvo. Cuando estés a menos de 16 metros de la ubicación del geocache, usa los ojos en vez del GPS. Los geocaches siempre están a plena vista, nunca enterrados, pero en ocasiones están camuflados ingeniosamente. Respeta el medio ambiente; practica Tesoro sí, basura no (Cache In Trash Out). Después de encontrar el tesoro firma la libreta del cache, deja el cache tal y como lo encontraste (y escondido), y comparte las historias y las fotos de tus aventuras del geocaching en Geocaching.com.
Antecedentes
La aplicación de Geocaching cumplió 15 años en mayo, pero no es nueva. Uno de sus antecedentes puede decirse que es “Letterboxing”, un juego que existe desde hace más de 160 años, que consiste en dejar cajas con sellos y dar las pistas a través de catálogos impresos, o más recientemente en sitios webs; quien encuentra la caja usa el sello para estampar su propio cuaderno y demostrar el hallazgo.
Dave Ulmer, de Oregón, Estados Unidos, fue el primero en esconder un cache y dar las coordenadas de GPS el 3 de mayo de 2000. Posteó la ubicación en una web y tres días después ya había registros de que dos personas lo habían encontrado. Hoy ese sitio cuenta con una placa conmemorativa. Además de geocaching.com existen otras webs que muestran dónde están los tesoros, como opencaching.com y Open Caching Network, con distintas webs para diferentes regiones del mundo.
Fuente: Organización Mundial de Turismo – OMT – www.unwto.org/es