Japón siempre nos ha parecido un gran mosaico repleto de una cultura milenaria y una modernidad que abarca todos los aspectos de la vida. Visitar este destino, al que se le llama el imperio del sol naciente, es como arribar a un paraíso que conjuga la tecnología más avanzada y una atmósfera llena de tradiciones y de una estética muy particular.

Japón es un archipiélago compuesto por 6.852 islas; las cuatro principales son Honshū, Hokkaidō, Kyūshū y Shikoku, y en ellas se encuentra el 97 por ciento del total del territorio nipón. Con más de 126 millones de habitantes es el décimo país más poblado, y el Gran Tokio es la mayor área metropolitana del mundo, con sus más de treinta millones de residentes.

Tokio, una ciudad para perderse

La experiencia de visitar Tokio es prácticamente inexplicable para el viajero que llega por primera vez y que ha oído hablar tanto de samuráis, geishas, sumo, karate, bonsáis, cerezos en flor (sakura),  imponentes rascacielos y antiguos templos. Hasta cruzar las famosas cuatro esquinas (cruce de Shibuya) es un espectáculo. Shinjuku nos brinda también la viva imagen del Tokio que todos tenemos en mente: calles con luces de neón, gente a la moda y excelente ambiente las 24 horas.

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La capital nipona representa el moderno estilo de vida japonés, es una ciudad con personalidad que ofrece más de lo que a simple vista nos presenta. El barrio de Akihabara es sinónimo de electrónica y tecnología, es el lugar para adquirir cámaras digitales, ordenadores y otros gadgets que hacen enloquecer sobre todo a las nuevas generaciones. Es el centro por excelencia de la industria del manga.

Tokio cuenta, además de la ciudad continental, con una amplia extensión de pequeñas islas, todas con numerosos encantos e islotes volcánicos de gran interés desde el punto de visita de la naturaleza. El budismo y el sintoísmo conviven con otras religiones en esta gran urbe, cuya población es mayoritariamente japonesa, pero en la que habitan amplias colonias de chinos y coreanos.

Japon-1El Japón más tradicional se nos revela en los numerosos templos budistas de Tokio, como el Templo Sensoji, ubicado en el barrio de Asakusa y el más antiguo de la ciudad; fue fundado en el año 628 d.C. En el centro de la ciudad el turista quedará embebido en el plácido Jardín de Rikugien, el Jardín Nacional Shinjuku Gyoen, el Jardín de Hama-rikyu y el Palacio Imperial, sede del emperador y de los shogunes Tokugawa desde hace más de 140 años. Semejante encuentro con el pasado ocurre a apenas 100 metros del tráfico intenso de las principales arterias.

Todas las ciudades japonesas tienen su barrio rojo, calles en las que se encuentran bares, clubes de entretenimiento para hombres y moteles que se pagan por horas. En Tokio este barrio se conoce como Kabukichō. Muchos hombres japoneses frecuentan estos lugares después de concluir la jornada laboral.

Un concepto llamado Shiseido

Un paseo por Ginza, una de las calles comerciales más caras del mundo, no está completo si no se visita el edificio de Shiseido. El nacimiento de esta marca de cosméticos data de 1872. La nueva sede de la empresa, una edificación de 56 metros de altura –obra de Ricardo Bofill–, aloja un show room, una galería de arte, un salón de té, dos restaurantes, una sala de conferencias para los directivos de la empresa y oficinas. La peculiar fachada, de estuco rojo, conjuga materiales de nueva tecnología con la estética de la cultura tradicional.

Japon-5Tokio desde las alturas

Para tener una mejor experiencia de nuestro viaje a Tokio, vale la pena verlo también desde las alturas. Tokyo Sky Tree,la torre de comunicaciones más alta del mundo,se encuentra en la capital japonesa y fue inaugurada en 2012. Posee dos observatorios, uno a 350 metros de altura y otro a 450. Este último ofrece una panorámica de hasta 70 kilómetros del área metropolitana de Tokio.

No se concibe una visita a Tokio sin ver la Tokyo Tower. Su mirador regala vistas espectaculares del templo Zojoji y de la Mori Tower entre otros edificios. Mori Tower es uno de los cinco edificios más altos de Japón. En él encontraremos desde un centro comercial hasta una galería de arte. Es aconsejable visitarlo de noche, pues la afluencia de gente es menor y las vistas nocturnas de la ciudad iluminada es asombrosa.

Otra de las torres que encantan al viajero es Fuji TV Headquarters, en el emblemático barrio de Odaiba, una pequeña isla artificial, una ciudad en miniatura con su propio rascacielos. Desde el mirador de las oficinas centrales del canal Fuji TV se pueden observar la bahía y el Rainbow Bridge.

Datos preliminares de la Agencia de Turismo de Japón revelan que un 88% de los visitantes extranjeros desea volver a visitar el país, pues lo consideran un destino atrayente que cumple con las expectativas de quien prefiere conocer lugares inolvidables. Tokio es la puerta a una civilización milenaria y llena de matices, y sería maravilloso que estuviera en cualquier agenda en espera de ser visitada.