A la costa norte de República Dominicana llegó hace dos años una opción contemporánea para complementar la oferta turística de la región, Gansevoort Playa Imbert. De estilo elegante y vanguardista, el resort se centra en los servicios de altísima calidad que demanda el viajero de lujo.
Ubicado en Sosúa, a 15 minutos del Aeropuerto Internacional Gregorio Luperón de Puerto Plata, el establecimiento dispone de 48 suites –de una, dos y tres habitaciones– con amplias terrazas privadas, además de una colección de penthouses de cuatro habitaciones. Cada penthouse posee jacuzzi privado en la terraza. Los amplios ventanales ofrecen vistas al mar, mientras que el diseño interior destaca por su sobria opulencia y se mezcla con duchas walk-in, bañeras personalizadas, cocinas de último modelo y acabados en piedra natural.
En el centro de la propiedad sobresale una piscina infinita con forma de media luna y cascada de tres niveles, que da a la playa. Recientemente se completó una piscina solo para adultos, lo que permite a los enamorados gozar de mayor privacidad y de momentos memorables en pareja. Entre las amenidades que incorpora el hotel se encuentran un gimnasio, un spa de día con sauna de estilo Hammam (baño turco o árabe) y un jardín de meditación y yoga.
A pocos minutos por carretera los huéspedes pueden disfrutar de lugares ideales para la práctica de surf, kiteboard, golf, tenis y andar a caballo. Las increíbles playas del entorno ofrecen una experiencia sinigual de buceo entre restos de barcos naufragados, un plus para los amantes de las profundidades y la arqueología submarina. Los huéspedes interesados en la naturaleza terrestre tienen a su disposición más de 1,5 km2 (400 acres) de junglas protegidas. Y los que buscan conocer la cultura y las costumbres pueden programar un recorrido por el casco histórico de la ciudad de Puerto Plata, famoso por sus casas de fachadas victorianas.
Sabores imperdibles
Baia Lounge, con especialidades mediterráneas gourmet y una carta de inspiración asiática, se suma a las ofertas gastronómicas del Gasenvoort Playa Imbert, que ya contaba con el restaurante Aguazul, especializado en sushi y sashimi, La Cantina Wine & Cigar Cellar, con una impresionante colección de vinos del mundo y un magnífico humidificador en un exclusivo entorno subterráneo.
Según Cristina Monción, directora de Marketing de la cadena en República Dominicana, todos los productos que sirve el establecimiento son frescos, las carnes se importan de Europa, mientras que las frutas y verduras llegan diariamente desde Jarabacoa y Constanza. “Los mariscos los trae cada mañana un pescador, directo del mar a nuestra cocina. Este ritual es un show para nuestros clientes, ya que muchos pescados son de muy buen tamaño y siempre hay quien se quiere tomar fotos con ellos”, explica la ejecutiva.
Un estilo que se impone
Gansevoort se caracteriza por innovar y crear precedentes. Para su primera propiedad se dio a la tarea de revitalizar el Meatpacking District de la ciudad de Nueva York, donde abrió el primer y único hotel cinco estrellas de servicios completos en ese vecindario, el hoy famoso Gansevoort Meatpacking NYC. Luego el grupo puso miras en el Caribe e inauguró Gansevoort Turks + Caicos. El éxito y el prestigio de la marca hicieron que abrieran un segundo hotel en Nueva York, Gansevoort Park Avenue NYC, que hoy es sinónimo de celebridad, moda y entretenimiento.
Lo mismo está sucediendo con la zona norte de República Dominicana, donde Gansevoort quiere ser pionero en establecer una zona de lujo con el fin de atraer a ese turista de alto poder adquisitivo que busca más que sol y playa. “Queremos atraer a viajeros que disfruten de una buena gastronomía, del bienestar en nuestro Spa L’OCCITANE y de las diferentes aventuras ecoturísticas de la zona. Gansevoort Playa Imbert es la combinación perfecta de lujo y comodidad, en un ambiente muy caribeño”, señala Monción.
Los planes de Gansevoort no quedan ahí. La directora de Marketing nos adelanta que está prevista la construcción de una plaza comercial de lujo que incluirá, entre otras atracciones, tienda de trajes de baño, deli de comida Kosher, Cigar Lounge, Coffee Shop y tienda de chocolates. “Como dice el propietario de la cadena, Ian Schembri Sant, si logramos posicionar una marca tan reconocida en la isla, los clientes que están acostumbrados a visitar otros de nuestros hoteles y de marcas similares, sentirán la confianza de venir a conocernos, ya que los estándares de lujo y servicio son muy consistentes, lo cual es una de las características más fuertes que poseemos. Esto no solo pone a Gansevoort Playa Imbert en el mapa, también a toda la zona y contribuye al reposicionamiento de Puerto Plata”.ν