El presidente de ASONAHORES, Luis Emilio Rodríguez Amiama, resaltó la importancia de la Circunvalación de La Romana, inaugurada por el presidente de la República, Danilo Medina, y que en los próximos meses las nuevas carreteras cambiarán el perfil económico de la región y el turismo.
“El impacto de esta obra es de tal magnitud que marca un hito, y los próximo años, al hablar del desarrollo de la región, habrá un antes y un después de la puesta en servicio de este conjunto vial”, aseguró el presidente de la Asociación de Hoteles y Turismo de la República Dominicana, ante el mandatario dominicano, acompañado de autoridades gubernamentales, jerarcas de la iglesia y dirigentes del sector turismo.
De acuerdo con Rodríguez Amiama, las nuevas vías que se han inaugurado en las últimas semanas y las que aún están en construcción y concluirán en los próximos meses, cambian el perfil económico de la región y también del turismo. Al mismo tiempo refuerzan los miles de millones de dólares invertidos por el sector privado en la zona en los últimos 20 años.
“Es un hecho innegable que estas vías son la inversión en infraestructura pública de mayor importancia para el turismo, pero al apuntalar este sector en sí mismo, también favorece un amplio conjunto de actividades productivas ya que el turismo es la rama de la economía con más amplios vínculos con el resto de los sectores”, afirmó.
“Aunque soy un representante del sector turismo, hablo en nombre de la comunidad.
En estos días se ha hablado mucho de la importancia de la nueva red vial para el turismo. Esto no debe sorprender a nadie, porque el turismo es el principal motor de la economía del país, y especialmente del Este”.
En ese sentido, Rodríguez Amiama expresó un reconocimiento:
• De los transportistas, que ahorran tiempo, reducen el gasto en combustible, neumáticos y mantenimiento,
• Del comercio, que ve facilitadas sus actividades, aumentadas sus ventas por el crecimiento del turismo y reduce costos al acercase a los centros de producción,
• De la industria, que reduce costos en transporte, y con empuje positivo al turismo, vera crecer la demanda de sus productos,
• La ganadería y la agricultura, que ve facilitados los accesos a las fincas, y el transporte de su producción, se beneficia del incremento del consumo y ve revalorizadas sus propiedades. A la vez, se facilitan los accesos a los principales aeropuertos del país, por donde se exportan todos los productos perecederos del agro.
• A las zonas francas, que tienen mejor acceso a los puertos y aeropuertos, se les reduce el costo de transporte y facilita la logística.
Para los actores económicos y para las personas, las nuevas carreteras cambian la dinámica del transporte, la seguridad y los costos. De comunidades cercanas, pero aisladas por carreteras con un trazado antiguo y sin capacidad para ofrecer un tránsito sin riesgos, se acercan a las ciudades, acortando el tiempo y las distancias para facilitar a las personas que las habitan el encuentro social y los beneficios del intercambio deportivo y cultural, dijo Luis Emilio.
Ahora las escuelas, los recintos universitarios, los hospitales, los centros culturales, los estadios deportivos, los puertos, los aeropuertos, las industrias, los centros de trabajo, en resumen, todas las riquezas de la región están más asequibles a todos y eso se traduce en desarrollo y crecimiento económico y social.
“Para los que transitan por la región, esta circunvalación significa ahorro de tiempo y de costos; y para los habitantes de La Romana, trae un desahogo y el descongestionamiento del acceso a la ciudad y de algunos sectores. Si lo sabemos manejar, y no tengo por qué dudar de que será así, será más fácil atraer al viajero que busca lo que nuestra ciudad ofrece, que ahora podrá disfrutar de lo que le gusta de La Romana sin temor a perder el preciado tiempo en un tedioso tapón”, recalcó.
Las modernas carreteras cambian la dinámica económica y social de las regiones y sus ciudades; ahora nos toca a nosotros cambiar la forma de manejar nuestra Ciudad, La Romana. Las nuevas carreteras nos plantean nuevos retos y nuevas oportunidades.
Las obras de infraestructura, y las puntuales herramientas de competitividad, definitivamente aumentarán el caudal de las inversiones privadas, nacionales y extranjeras, creando el ambiente propicio para atraer los capitales necesarios y lograr las metas que nos hemos planteado, diez millones de turistas anualmente.
“Precisamente desde aquí, desde las playas y las costas del litoral sureste del país, estamos listos para que juntos, propaguemos a través del ordenamiento y la inversión, la semilla de prosperidad, y nuestras comunidades se beneficien de estas importantes obras”, concluyó.