Hablar con Rosalinda Thomas, reconocida en numerosas ocasiones como una de las mujeres que más ha hecho por el turismo en República Dominicana, es recorrer más de tres décadas de historia y revivir momentos gloriosos del desarrollo de esta industria en el país.
Su vocación por el turismo comenzó siendo apenas una estudiante, cuando hacía de anfitriona de los viajes de diversión que organizaba con grupos escolares. Eran los años en que asistía al Colegio Santo Domingo. Luego, cuando se casó, se fue a vivir a la isla de Guam con su esposo, John Thomas, un ingeniero eléctrico de origen inglés, quien trabajaba para el Gobierno. Allí Rosalinda se dio a la tarea de promocionar el país como destino, labor que continuará realizando hasta que exhale el último respiro, confiesa a Bohío Internacional.
De sus tantas anécdotas recuerda una que nos hace reír. “Iba con mis tres hijas, una de ellas estaba un poco pasada de peso, y le pido a un señor que nos ayude a descender del avión. Para mi sorpresa, resultó ser un alto general de Guam a quien un batallón esperaba en tierra para rendirle honores. Todos pensaron que yo era su esposa y la niña su hija”. En 1972, a su regreso de Estados Unidos y luego de analizar las necesidades de promoción turística, Rosalinda formó Thomas Tour, una agencia de viajes con categoría de operadora turística, ubicada en la calle Pedro Henríquez Ureña, donde aún permanece. “En ese año comencé a unir a todos los que deseaban emprender este campo, entre ellos a Luis Augusto Caminero y Rita Cabrer. Ahí surge la Asociación Dominicana de Agentes de Viajes.
Con los turoperadores empezamos a hacer congresos en diferentes partes del mundo: Curazao, Miami, Puerto Rico”, relata. Pionera indiscutible A comienzos de la década del ´70 los agentes de viajes dominicanos no participaban en eventos internacionales, por lo que Rosalinda fue la pionera. La inserción en el mercado extranjero la inició con la Asociación Americana de Agentes de Viajes (ASTA) y la entonces Secretaría de Turismo. “He dedicado mi vida al turismo. Voy a morir haciendo lo que me gusta porque me apasiona. Y si volviera a nacer, volvería a trabajar en este sector”, confiesa con vehemencia.
A pesar de los logros alcanzados por el país, e incluso ser el destino número uno del Caribe, Rosalinda considera que falta mucho por hacer, sobre todo, en cuanto a la unión de los industriales y operadores turísticos. “Antes el turismo dominicano era solo emisivo. Apenas había hoteles en el país. Recuerdo que el primer grupo que traje tuvo que alojarse en villas porque no había hoteles con habitaciones disponibles”. En 1982 la Confederación de Organizaciones Turísticas de América Latina (COTAL) celebró sus 25 años en República Dominicana. “En esa ocasión la delegación española invitó a hacer el congreso nuestro en España, si yo aceptaba ser la presidenta, pero determiné que esto sería por votación. Entonces resulté electa.
Estuve involucrada en la organización del congreso de la Asociación Dominicana de Agentes de Viajes y Turismo (ADAVIT), que fue todo un éxito. De ahí surgió Inversiones Turísticas Dominicanas, donde participó Fernando Rainieri. Celebramos un congreso en Roma y comenzó el auge del turismo italiano. Seguimos el modelo de Estados Unidos, donde el peso lo llevan los agentes de viajes, y nos dio resultados”, explica Rosalinda.
La Messe de Berlín y el turismo alemán Desde 1972 se fue insertando en las ferias internacionales de turismo, hasta que en 1987 asistió a la ITB (Messe de Berlín), a la que considera uno de los mejores escenarios para vender el producto dominicano. “Me entregué con mucho fervor a esa actividad. Las cámaras de comercio eran las que representaban al país en ferias. Creo que fui la única persona que asistió sin ser de una cámara, representé a Thomas Tour International”, recuerda Rosalinda, y asegura que no fue fácil conseguirlo. “Aquí es donde comienzo a representar la Messe de Berlín para todo el Caribe. Esto se logró en 20 m2, que era el espacio que compartían Panamá y República Dominicana, pues no había un pabellón del Caribe.
Eso impulsó el proceso para que hoy hayamos logrado conquistar el puesto número uno de la región. Solo hay que saber mantenerlo”. En los últimos años el turismo procedente de Alemania ha cedido terreno ante el que llega de Francia, pero para Rosalinda este comportamiento tiene una explicación: “No se trata de que no se haya trabajado bien esa línea, sino que Alemania ha querido ampliarse hacia otros países. Ellos nos han ayudado siempre en nuestra promoción. Francia se ha dedicado a promover el Caribe, y ha sido un éxito”. Según la veterana promotora, dos puntos son esenciales para catapultar aún más el turismo dominicano. “En todas las reuniones seguimos mencionando la necesidad de concretar el proyecto del Centro de Negocios del Caribe.
Los turoperadores y agentes de viajes nos piden un centro de convenciones, y eso es vital para que se nos reconozca también como un destino de congresos. Otro punto es la reanimación de Puerto Plata. Yo he trabajado todos los polos turísticos y a mi entender lo que sucedió con ese polo fue la falta de unión. Pero siempre he aportado mi granito de arena. Hasta en la Messe de Berlín hicimos lo posible por mercadearlo”. Abanderada del golf Rosalinda Thomas fue la primera mujer en la Cámara Británica de Comercio. “Lo digo con mucho orgullo, más aún por la forma en que sucedió. Soy de las personas que les gusta la votación para llegar a un acuerdo”.
Es natural de San Pedro de Macorís, donde estuvo el primer campo de golf. “Organicé torneos de la Cámara Británica, italiana, japonesa y varias más. Mis planes siempre han sido promover el golf en Estados Unidos. Quiero llevarlo adelante, a la par de nuestro turismo. Aunque nuestro país es pequeño tenemos excelentes campos, más de 30, muchos de ellos diseñados por grandes figuras del golf”. El turismo en RD está en su punto Rosalinda considera que falta más organización en los hoteles. “Los tenemos muy buenos. Y ese aspecto es vital para tener mejor y mayor turismo en nuestro país. Quisiera que escucharan mis consejos, de lo que hay que añadir, lo que sobra, pues me creo con bastante experiencia debido a los años que llevo en el sector. Por eso me tomo la libertad de aportar algunas ideas”.
Otros de los mercados hacia donde hay que poner los ojos, según Rosalinda, son los de Singapur, Corea, Japón, China y Taiwán. “El turismo asiático, tanto receptivo como emisivo, es excelente, y esa región posee una gran organización. ¿Que si están nuestros hoteles listos para el turismo asiático? Hay que organizarse para poder mercadear nuestro producto. Debemos ser más estrictos, más ordenados, pues ellos lo son. Es la clave para penetrar esos nichos”. Rosalinda reconoce la labor de la familia Caminero en el desarrollo y promoción del turismo de República Dominicana. “Ellos fueron los primeros que hicieron por el turismo en nuestro país. Basta ver su trabajo con Bohío y La Cotica, que todavía son referencias obligadas para todo profesional del sector que promueva el destino fuera de nuestras fronteras.
El papá de Dolores Vicioso hizo un pequeño periódico, que yo considero grande, en aras de un turismo mejor. Son varios los que puedo mencionar en esta lista, desde Fidelina Pimentel hasta Haydée y Frank Rainieri. Todos somos abanderados, no ha sido un mérito solo mío. Y digo más, deberíamos pensar en el Caribe como destino y venderlo como tal. Todo se puede lograr con la unificación de la región”, concluye la ilustre dama.