Andrea Medina, cónsul general de República Dominicana en Guadalupe y las Antillas Francesas, nació en La Descubierta, provincia de Neiba. Es sureña de nacimiento pero creció entre Mao y Santiago de los Caballeros. De su infancia guarda gratos recuerdos: su abuela (Mamá Linda), que era hermana del Corazón de Jesús, y su tía la llevaban todos los domingos a misa, y su amiga Magalis era la madrina de todas sus muñecas.
Bajo su gestión, el consulado en esos territorios franceses de ultramar ha experimentado notables avances que han beneficiado a ambas partes, desde el intercambio económico y cultural, hasta la implementación de facilidades para el voto en las elecciones dominicanas de los nacionales residentes en las Antillas Francesas.
En 1985 Andrea comenzó sus estudios de Licenciatura en Comunicación Social, mención Periodismo, en la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD). Por esos años llegó a trabajar con importantes periodistas y comunicadores de la talla de Joseph Cáceres y Luis Medrano. A su formación profesional se suman estudios de hotelería, turismo y gestión de empresas, cursos de actualización diplomática y consular, y seminarios sobre comercio exterior y leyes internacionales. En París se matriculó en cursos de producción radial y de locución.
Andrea es una persona que inspira confianza, su trayectoria habla por sí sola de su alto sentido de la responsabilidad y del compromiso con los lineamientos de política exterior del ministerio al que pertenece. Para conocer más de su encomiable labor y de los logros alcanzados por el consulado, la diplomática nos recibió en su residencia, donde compartimos una amena tarde.
¿Qué quería ser cuando fuera grande?
Quería ser actriz. Recuerdo que imitaba a Kelly, de Los ángeles de Charlie; mi amiga Magalis era Sabrina y mi hermana y primas eran la otra parte del elenco. (Risas).
¿En qué consistió su carrera universitaria?
Debido a que siempre me gustó la comunicación, estudié periodismo, y lo hice entre Santiago y Santo Domingo. Durante la carrera tuve la oportunidad y el honor de trabajar para Joseph Cáceres, quien en ese entonces era mi principal motivación.
¿Cuándo decide interesarse en el arte y el espectáculo?
Durante el tiempo que pasé junto a Cáceres, descubrí en mí una gran pasión por la música y me di cuenta de que además de imitar a Kelly, también podía cantar. (Risas). Mi carrera artística no hubiese iniciado sin la intervención Joseph Cáceres y de Luis Medrano.
¿Cómo se da su llegada a Francia?
Con la orquesta estuvimos de gira por varios escenarios de Europa, me enamoré de esa cultura y quise conocer más del Viejo Continente. Qué mejor lugar para comenzar que Francia. Cuando me radiqué allá, trabajé como asistente de producción en la cadena nacional de radio y televisión francesa RFO. Luego presenté varios programas de temporada junto a personalidades del Caribe francés, y debido a la experiencia que adquirí, logré realizar mi sueño de crear y presentar un programa latino para dar a conocer otros aspectos de nuestra cultura. Así nació el programa “Momento latino”.
¿En qué instancias da el salto a la diplomacia y las relaciones internacionales?
RFO tiene sucursales en el Caribe, y solicité mi traslado a la isla de Guadalupe para estar más cerca de mi país. Allí pude constatar que la comunidad dominicana necesitaba más representación y apoyo. A raíz de esto procedí a iniciar el complejo proceso necesario para convertirme en la representante oficial de mi país para esa comunidad, primeramente en 2004 con un Consulado Honorario para Guadalupe y posteriormente con un Consulado General para siete territorios del Caribe.
¿Cómo es la salud de las relaciones entre República Dominicana y esos territorios?
Excelente. Siempre he trabajado junto a mi equipo con el objetivo de fomentar los intercambios entre las islas y República Dominicana. Una muestra de ello es que el Gobierno de la isla nombró el 2013 como “Año de la República Dominicana”. Durante esos 12 meses se realizaron múltiples actividades culturales, deportivas, artísticas y gastronómicas y varias personalidades dominicanas fueron invitadas a Guadalupe para realizar encuentros y dictar conferencias, y viceversa. Tanto la comunidad dominicana como yo misma nos sentimos muy agradecidas por semejante reconocimiento a nuestro país.
Los logros del consulado han sido notables durante estos años de gestión. Muchas de las iniciativas han sido costeadas con recursos suyos. ¿Cuál logro ha sido más cuesta arriba? ¿Cuál le ha dado más satisfacción?
La propia instalación del Consulado General con una estructura digna de una representación de nuestro país. También lograr que el Gobierno francés me permitiera que la comunidad dominicana residente en las islas pudiera ejercer el derecho al voto para las elecciones presidenciales de República Dominicana de 2012, y al mismo tiempo presentar esta comunidad a la Junta Central Electoral para que fuera tomada en consideración al momento de crear los colegios electorales y en los operativos de cedulación.
Usted movió “cielo y tierra” para lograr que la JCE validara el voto de esos connacionales de las islas. Y un grupo, de los que no pudieron empadronarse, viajó desde Guadalupe y Guayana Francesa en vuelos costeados por usted. ¿Qué la motivó a llevar a cabo esta iniciativa?
Debido al trabajo que he realizado por años con las diferentes líneas aéreas, logré que se nos facilitara dos aviones para que los miembros de la comunidad que presentaban cierto tipo de dificultades con sus documentos, y que deseaban ejercer el derecho al voto, pudieran hacerlo viajando directamente a nuestro país. Debo decir que como soy muy patriota y peledeísta, les pedí que viajaran con una camiseta del movimiento creado por mí para las islas, ya que soy la presidente del partido en las Antillas Francesas.
¿Cómo reflejan esos territorios su interés en RD? ¿Cómo se ha comportado el flujo de turistas en estos años en los que usted ha estado al frente del consulado?
Existen varias empresas que se han instalado en República Dominicana. Muchos de nuestros productos están siendo importados a estas islas, no es extraño encontrar algunos de ellos en los supermercados y las tiendas. También las líneas aéreas locales han aumentado sus vuelos a nuestro país y esto debido a los grandes atractivos que poseemos.
Y ya que hablamos de turismo, ¿se sabe qué destinos dominicanos son los preferidos por estos viajeros de los territorios franceses de ultramar?
Por supuesto, la capital Santo Domingo; también Samaná y Punta Cana están entre los principales puntos.
¿Cuán cerca cree usted que estamos de alcanzar la meta propuesta por el presidente Medina de los 10 millones de visitantes anuales para el año 2022?
Ya estamos trabajando para lograr esa meta del presidente Danilo Medina. Cada dominicano, ya sea de forma personal o a través de su empresa, así como las representaciones diplomáticas en el extranjero, debemos hacer todo lo posible por lograrla, pues con este aumento de visitantes al país numerosos sectores de nuestra economía serán beneficiados.
¿Considera que la cada vez más cerca apertura de Cuba pueda interferir con los planes dominicanos en materia de turismo o arrebatarnos parte de la cuota de mercado estadounidense?
No creo que esto llegue a interferir, ya que existe una clientela para cada mercado. Ahora bien, nosotros debemos hacer todo lo posible para promocionar de la mejor manera posible nuestros atractivos, que son muchos. Eso me recuerda una de las campañas publicitarias del Ministerio de Turismo, “República Dominicana lo tiene todo”. Nos queda a nosotros trabajar cada día para que el resto del mundo conozca nuestro potencial y venga a visitarnos.
Por su trayectoria, los años que vivió en Francia y su labor como cónsul en Guadalupe, a usted se le considera una persona que inspira confianza. ¿Cómo es la vocación de entrega de Andrea Medina? ¿Cuál es su filosofía de trabajo y compromiso?
Gracias por esas palabras. Yo siempre he dicho que se debe creer en Dios y en sí mismo. Ningún sueño, ideal o proyecto es imposible si te lo propones y trabajas con esfuerzo para lograrlo.
¿Qué significa su familia para usted? ¿Cómo ven ellos su carrera diplomática?
Mi familia es el motor de mi vida, la confianza que ellos me brindan me ha impulsado en mi carrera profesional.