La Asociación de Hoteles y Turismo de la República Dominicana (ASONAHORES) pidió al Banco Central reponer a los hoteles el derecho a cobrar en dólares con tarjeras de crédito internacionales los servicios que ofrecen a los turistas extranjeros que utilizan estos establecimientos.
La organización señala que el retiro de los sistemas de cobro en dólares para tarjetas de crédito, ordenado el año pasado ha creado múltiples problemas inmerecidos a los hoteles, que como empresas que generan dólares no deberían enfrentar dificultades para manejar esta moneda.
ASONAHORES señala que el Banco Central debe establecer los requisitos que deben cumplir una empresa para ser autorizada instalar una terminal de cobro con tarjeta de crédito en dólares, considerando como condición principal que sus servicios regularmente sean utilizados por visitantes extranjeros que utilicen plásticos expedidos por bancos de otros países.
“La solución al uso de terminales de cobro en dólares con tarjetas de crédito en empresas que no prestan servicios a visitantes extranjeros, no es retirar todas las terminales”, plantea ASONAHORES, ya que lo que corresponde es “regular el uso de estas y permitirlas en las empresas que regularmente ofrecen servicios a turistas que vienen del exterior”.
La organización recuerda que el manejo de divisas se basa en un sistema de libre convertibilidad que ha sido fundamental para el desarrollo del turismo, y el éxito obtenido hasta ahora nos dice que “lo más conveniente para la economía es perfeccionar las facilidades operativas para el turismo, no dar marcha atrás”.
Señala que los hoteles producen dólares y deben tener la facilidad de pagar los diversos compromisos que tienen en dólares, y citó como ejemplo las comisiones a las agencias y otros intermediarios; la promoción internacional, el pago de la franquicia y los costos que genera el uso de las marcas internacionales.
ASONAHORES explica que el Banco Central aprueba financiamientos en dólares a los hoteles porque estos generan dólares, y sería absurdo desde el punto de vista económico que si reciben préstamos que deben pagar en dólares, no puedan captar y utilizar los dólares que producen para pagar ese compromiso.
Igualmente, señala la entidad, las tarifas de los hoteles se publican en dólares y cuando se cobran en pesos con tarjetas de crédito internacionales, se producen variaciones y cuando el reporte llega al cliente con un incremento, aunque este sea de reducido valor, el hotel y las agencias de viaje en Internet aparecen alterando las tarifas originales y esto provoca reclamos que afectan la imagen del país como destino turístico y la reputación del establecimiento y el intermediario.