El empresario español Juan José (Pepe) Hidalgo se declaró en rebeldía y advirtió ante el tribunal que no comparecerá más a las audiencias del juicio penal que se le sigue en esta jurisdicción judicial por alegada violación a la ley 5869 sobre propiedad inmobiliaria en Punta Cana, en perjuicio de inversionistas norteamericanos.
El empresario, envuelto en varias litis judiciales por problemas de tierra en diversas zonas turísticas de República Dominicana, incidentó la sala de audiencias de la Cámara Penal del Tribunal de Primera Instancia de La Altagracia, luego de que el juez presidente del tribunal, magistrado Andrés Rijo Delgado, acogiera una petición de los abogados de la parte civil, doctores Andrés Cordero Hache y Omar Chapman, de que se realizara una experticia sobre la propiedad en conflicto, reclamada por el ciudadano norteamericano Sandalio Suárez Real.
Ante la actitud del imputado, el juez Rijo Delgado intervino para defender sus decisiones en el tribunal y advertir que no aceptaría presiones ni se prestaría para actuar con parcialidad en sus decisiones.
Sin embargo, el juez Rijo Delgado anunció su inhibición del caso, por lo que la Corte de Apelación de San Pedro de Macorís deberá designar, por segunda vez, un nuevo magistrado para la continuación del juicio.
Los abogados del demandante calificaron como abuso de poder, prepotencia y gran reto para la justicia dominicana la posición del empresario español, quien además de lanzar improperios contra las autoridades del tribunal y abogados de la parte civil, violentó el orden y solemnidad que deben regir todos los roles de audiencias en los tribunales de República Dominicana.
La audiencia fue reanudada el lunes luego de un mes de aplazada debido a que Hidalgo Aceras envió un certificado médico en el que señalaba que no estaba en disposición de asistir a audiencia por problemas de salud.
La querella admitida contra Hidalgo y Pérez Menéndez está motivada en una acusación presentada a través de sus abogados por el ciudadano estadounidense Sandalio Francisco Suárez Real, quien alega que en los predios usurpados en su perjuicio se proponía construir junto a otros inversionistas norteamericanos una marina turística con una inversión inicial de US$4 millones.
El demandante, Sandalio Suárez, ex capitán de la Marina de Estados Unidos, alega que Hidalgo, propietario de Air Europa, Hotel Be Live Grand Punta Cana y de otras empresas en España, mantiene invadido parte de su terreno en Cabeza de Toro, el cual forma parte de un hotel de su propiedad.
Hidalgo también es protagonista de otras litis inmobiliarias en la zona de Uvero Alto, Punta Cana, una con un empresario artístico a quien le compró una propiedad y trató de deshacer el negocio, y otra con los herederos de una señora, ya fallecida, con quien firmó una opción de compra y le impuso una litis sobre el título de propiedad sin haberle entregado un centavo.
Además de este caso, los abogados que representan al ciudadano cubano-americano acusaron de difamación e injuria a Hidalgo, por lo cual el empresario español enfrenta otro proceso en la Cámara Penal unipersonal de Higüey.