“El mundo ha cambiado mucho desde la Segunda Guerra Mundial pero las instituciones globales están basadas en principios que datan de la posguerra”, manifestó el presidente ejecutivo de CAF, banco de desarrollo de América Latina, Enrique García, en la Tercera Conferencia CAF-LSE.
“Quizá sea el momento de cambiar esos principios y considerar nuevas iniciativas,” agregó García en la conferencia sobre “Gobernabilidad mundial en una era de incertidumbre,” que tuvo lugar el 15 de enero en la London School of Economics.
Asimismo, el presidente del banco de desarrollo latinoamericano señaló que la región tuvo una década muy positiva de crecimiento y subrayó que los desafíos que encara hoy América Latina constituyen una oportunidad para llevar a cabo las reformas estructurales que fueron ignoradas cuando las economías estaban pujantes.
Al abrirse la conferencia, tras las palabras de bienvenida del director del LSE, Craig Calhoun, el titular de la Unidad Sur Global de la institución londinense, Chris Alden, coincidió en la necesidad de darle mayor importancia a la gobernabilidad global y los retos asociados a ella.
Ese concepto también fue enfatizado por Michel Camdessus, ex director del FMI y primer expositor del panel inicial, que integraban además Celso Amorim, ex ministro de Relaciones Exteriores y Defensa de Brasil, y Enrique Iglesias, ex presidente del Banco Interamericano de Desarrollo.
“Dado este panorama [de incertidumbre], tenemos que decidir qué tipo de gobernanza implementamos”, dijo Camdessus.
Enrique Iglesias, por su parte, dijo que los desafíos son profundos pero se declaró optimista y estimó que el mundo lograría superarlos.
“Estamos presenciando la mayor transferencia de poder en la historia de la humanidad,” dijo. “Ya ocurrió esto en la época de la revolución industrial, con la transferencia de poder de Oriente a Occidente, pero ahora estamos viendo la transferencia al Este y al Sur, con el surgimiento de las economías emergentes de Asia y del sur del mundo”.
Iglesias recordó además una conversación que mantuvo con el secretario general de las Naciones Unidas U Thant en la década de 1960, en la que Thant advirtió que en el futuro el mundo enfrentaría un conflicto de razas, religiones y nacionalismo.
“Esto es lo que tenemos que tomar en cuenta, el enfrentamiento de valores”, dijo Iglesias.
Amorim, por su parte, se refirió a las dificultades que afronta la economía de su país en estos momentos, y expresó preocupación por las reacciones a ella.
“Realmente le temo al clima psicológico que se está generando, una crisis de causas muy concretas, tangibles”, expresó.
En el siguiente panel, que analizó el papel de las instituciones financieras internacionales, Guillermo Perry, ex ministro de Finanzas de Colombia, resaltó la “enorme diferencia” que supuso CAF para las economías latinoamericanas, en una época en que el Banco Mundial (BM) y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) comenzaron a reducir o suprimir el apoyo a proyectos de infraestructura.
Por otra parte, el ex presidente de la República Dominicana Leonel Fernández, presento una ponencia llamada “Navegar la incertidumbre”, en la que se refirió a la situación global.
El mundo es imprevisible y volátil, y también más complejo y frágil, dijo Fernandez en su intervención. “Sin embargo, tenemos la misma estructura de la Segunda Guerra Mundial”. El andamiaje institucional mundial está basado aún en los acuerdos de Yalta y de Bretton Woods.
Finalmente, durante el último panel, que estuvo integrado por Rebeca Grynspan, Secretaria General de la SEGIB, Joao Carlos Ferraz, Director del Banco de Desarrollo de Brasil (BNDES) y José Luis Machinea, ex Secretario Ejecutivo de la CEPAL, las conclusiones fueron que América Latina está preparada para enfrentar los tiempos difíciles que atraviesa actualmente el mundo pero necesita avanzar más en su integración regional.